Reconocemos que la mayordomía es un tema del cual muy poco se quiere hablar en las iglesias, aún en nuestra propia cultura es un tema un tanto escaso de estudiar. Administración responsable consiste en un buen uso de los recursos, al mismo tiempo un buen control de todos los recursos.
La mayordomía bíblica
Es una relación personal de responsabilidad entre Dios y el hombre.
En el mismo momento en que el hombre fue creado, su primera asignatura que Dios le dio fue la mayordomía.
La mayordomía no debe ser vista solo como manejar algo, sino mucho más allá y es en tener una íntima relación de cercanía con el dueño que nos ha confiado sus bienes.
Se debe entender que la mayordomía cristiana debe ser administrar las posesiones que Dios nos ha dado. La mayordomía en su origen y aplicación es puramente espiritual. No se rige por nuestro exterior, se rige por nuestro interior. Ya que hemos sido capacitados por el evangelio.
Colosenses 1:3-10
La principal mayordomía del cristiano es el evangelio.
Significa administrar el evangelio en nuestras vidas. Utilizar y echar mano del evangelio en todas las áreas. No se excluye el evangelio de la vida diaria, al contrario, el evangelio debe marcar la manera en que vivimos.
Secularismo
Es la ideología que aleja la atención del hombre de lo sobrenatural y de la vida después de la muerte, y la dirige hacia este mundo y la edad presente.
Esta ideología se centra en el hombre y acepta lo relativo negando lo absoluto. Se basa en su propia manera de apreciación de las cosas. El hombre es el estándar para saber sus propios límites.
Para el secularismo el hombre cristiano tiene una mente cerrada, es decir; todo lo que un creyente hace está regido por una autoridad que prohíbe el qué y qué no hacer. Según el secularismo toda la vida debe ser regida por uno mismo, lo espiritual debe quedar en la iglesia. Y lo secular debe ser el que hacer de la vida diaria.
Pero, ¿Qué dice la Biblia?
1 Corintios 10:31
Colosenses 3:17
La vida debe estar centrada y girar en torno al evangelio. No podemos desligar lo espiritual de lo material, no podemos dejar el evangelio por un lado mientras vivimos en el mundo.
Mateo 6:22-23
Si vamos a hacer tesoros en el cielo, tenemos que tener la luz del evangelio en nosotros.
Sino tenemos esta visión pura descrita en el versículo anterior nuestra vida será un reflejo de la malignidad del pecado. Y eso se verá reflejado en el dinero. En la manera en que administramos el dinero.
La mala mayordomía del dinero denotara:
Avaricia
Codicia
En Lucas 12 Jesús reprendió a aquellos ricos por su avaricia y codicia, de la misma manera advirtió que debían librarse de eso.
El cristiano se regocija con las cosas materiales por considerarlos regalos de Dios; no las ve como pecado sino como una responsabilidad dada por Dios mismo. Por tanto es un compromiso de administrar las posesiones dadas por nuestro Señor para llevarle gloria mediante la buena administración a través del evangelio en nuestras vidas.
El mayordomo cristiano debe mantenerse alerta del peligro del materialismo. De poder ser dominado por el dinero y las posesiones.
Como cristianos no debemos poner nuestra confianza en las riquezas ni en lo material, sino ser dadores alegres compartiendo con quienes no tienen.
El cristiano reconoce que la avaricia y codicia es pecado, por eso su estilo de vida debe ser un modelo de disciplina y contentamiento en lo que Dios nos da.
5 implicaciones sobre la mayordomía considerando a Dios como creador y redentor
Dios existe y es el centro de todas las cosas.
Dios es el creador y dueño de todo lo que existe.
Puesto que Dios es Espíritu y nosotros fuimos creados a su imagen, todo en la vida es espiritual.
Siendo Dios el creador y gobernador de todas las cosas, El es el único digno de nuestra adoración.
El propósito de la Cruz es regocijarnos con Dios y ponerlo a Él en el lugar que le corresponde en nuestros corazones.
El uso espiritual del dinero centrado en el evangelio debe comenzar mirando la vida a través de la ventana de la doctrina de la creación y la redención.